De acuerdo al estudio Padres vs. Jóvenes de la Asociación de Comunicadores Sociales Calandria, el 51% de jóvenes no dialoga con sus padres sobre temas relacionados a su sexualidad como violencia sexual, enamoramiento, embarazo adolescente, métodos anticonceptivos, entre otros.
Un 75.12% de jóvenes señala que no conversa sobre su sexualidad con el padre, a diferencia de un 57.3% que sí lo hace con la madre. En ese sentido, la madre se convierte en la figura central en la comunicación familiar y el padre, mantiene una figura ausente.
En el caso del abuso y acoso sexual, los y las adolescentes indican que buscan conversar con ambos padres, sin embargo, los adultos tienden a vincular esa conversación con la madre. Asimismo, el 54.3% de adolescentes siente más confianza para hablar sobre violencia sexual con sus amigos; el 23.3%, con la madre y el 8%, con el padre.
Los adolescentes tienen expectativas más altas en el tema de educación sexual sobre la familia, la escuela y los centros de salud; mientras que la atención de los padres está predominantemente sobre el abordaje desde la escuela y la familia, otorgándole un menor rol a todas las demás figuras incluida la del centro de salud, pese a que en opinión de los padres, la información prioritaria que debe brindarse a los adolescentes es sobre embarazo adolescente y sus consecuencias.
Lourdes Sandoval, coordinadora de proyectos de Calandria, indica que cada día 9 niñas y adolescentes son violentadas sexualmente y el mayor número de delitos son cometidos en el propio hogar de la víctima (41.9%), según las denuncias realizadas en la Policía Nacional del Perú (PNP). Si se considerará los abusos que no son denunciados, esta cifra podría incrementarse cuatro veces más.
Hace una semana, una menor de 17 años abandonó a su bebé en un baño del Hospital de la Solidaridad de El Agustino y los padres no estaban enterados de este embarazo. Para la especialista de Calandria, “es una muestra de la poca confianza que sienten los adolescentes con sus padres ante casos de embarazo, por lo que se sienten solos y toman decisiones de acuerdo a los consejos de sus amigos o internet”.
La Asociación de Comunicadores Sociales Calandria viene promoviendo la campaña Ya no es secreto, una iniciativa que apuesta por el diálogo y la denuncia del embarazo de niñas y adolescentes como producto de actos de violación sexual. Además, busca crear conciencia sobre las situaciones de riesgo en los hogares en el que los padres y las madres juegan un rol fundamental para prevenir la violencia sexual.