La comida chino-peruana es una tradición posicionada en las costumbres gastronómicas del país desde hace casi un siglo.
Favorita de muchos, es muy popular gracias a sus exóticos sabores y a espectaculares técnicas como el salteado, fusionado todo con nuestra sazón y no pocos ingredientes locales. Sin embargo, ¿cómo son los sabores tradicionales de la cocina china propiamente dicha? Eso es lo que en cada bocado responde la carta de Shen, Restaurante Chino y Dim Sum Bar.
“Lo que nos diferencia de esas otras opciones es el salteado, la rapidez, la fuerza exacta del fogón, saber manejar delicadamente el wok en cada preparación y un toque especial en el sabor que caracteriza a Shen. Gracias a este despliegue de técnicas hemos logrado una buena acogida en La Molina, un distrito difícil”, asegura el chef principal de Shen, Orlando Díaz. Esta propuesta de cocina china tradicional, con cinco meses en el circuito gastronómico, destaca por la calidad y frescura de los ingredientes, así como la crocantes y texturas en los diversos platos.
Shen ofrece entradas chinas muy tradicionales como su wantan original, que es toda una sorpresa; Siu Mae, langostinos al Panko y Ensalada Hau, también encontrarán los infaltables e inolvidables (siguiendo las recetas clásicas con la fusión peruana): el Kam Lu Wantan, Ty Pa Kay, Chi Jao Kay, Limon Kay, entre otros, también desarrollados según los dictados originales. Así también algunos platos y salsas de la casa.
Barra de Dim Sum
Una de las especialidades más requeridas por los clientes de Shen son los bocaditos Dim Sum, una especialidad cantonesa que suele servirse en porciones pequeñas, ideal para ser acompañada con una bebida a media tarde. Se caracterizan por ser suaves y crocantes, según el Dim Sum elegido, y se presentan en pequeños platos o vaporesas.
“Cada restaurante tiene una manera peculiar de cocinar los bocaditos Dim Sum, nosotros en Shen los preparamos con un toque más dulce del normal, lo que permite encontrar un sabor diferente al resto, además de la suavidad de la masa, y la crocantez del wantan, gracias a su cocción instantánea”, agrega el chef Orlando Díaz.
En Shen también hay postres y bebidas que sí apuestan por la fusión con ingredientes chinos y peruanos, como el Shen Sour, elaborado con pisco, jarabe de kion y canela china; el Qianye, milhojas de wantan y base de crema pastelera de kion; el Banano Wantán, relleno de plátano caramelizado con salsa de chocolate; y el Merengado de Lae Chee, servido con merengues crocantes, manjar y fresas, entre otros.
Al llegar a Shen, los comensales pueden optar por dirigirse a alguna de las tres zonas en que se divide el salón: de pescados y mariscos, barra de Dim Sum y pollo, chancho y pato, ambientados para disfrutar momentos cálidos en familia, con una arquitectura y diseño interior que sale también de los parámetros de la cocina chino-peruana, para una experiencia más cosmopolita.