Niños y niñas menores de 5 años con fiebre, tos, respiración rápida y falta de apetito, deben ser llevados de inmediato al centro de salud más cercano.
Ante el inicio de la temporada de bajas temperaturas en el país, el Ministerio de Salud (Minsa) alertó a los padres de familia a estar alertas frente a cualquier síntoma de la neumonía en niños y niñas menores de 5 años, ya que ello puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte.
Cuando un niño o niña tiene tos, fiebre, respiración rápida, pérdida de apetito, cansancio y llora constantemente, es muy probable que tenga neumonía y debe ser llevado de inmediato al centro de salud más cercano para el tratamiento oportuno.
Según explicó la Dra. Flor Santa Cruz, del equipo técnico de Etapa Vida Niño de la Dirección General de Intervenciones Estratégicas en Salud Pública (Digiesp) del Minsa, cuando un niño no es atendido a tiempo “se pueden generar complicaciones que provocarían la muerte”.
Para prevenir las infecciones respiratorias agudas (IRA) y neumonía en los infantes es importante que los padres de familia lleven a sus hijos a sus controles de crecimiento y desarrollo (Cred), cumplan con el esquema nacional de vacunación y mantengan la lactancia materna exclusiva hasta los seis meses.
“Después de los seis meses se debe brindar alimentos nutritivos a base de sangrecita, hígado, bazo, carne, pescado, frutas, verduras y lactancia materna complementaria hasta los dos años de edad. Si los niños y niñas están bien nutridos tienen menos posibilidades de enfermar por IRA y neumonía”, apuntó la especialista.
El mejor aliado de los padres de familia para hacerle frente a la neumonía es la prevención y seguir las recomendaciones del personal de salud para el cuidado infantil y sobre todo reconocer los signos de alarma de la enfermedad para acudir al establecimiento de salud oportunamente.
En el marco del “Plan de prevención y reducción del riesgo de desastres por bajas temperaturas 2018-2020”, el Minsa está fortaleciendo las capacidades del personal de salud de las regiones priorizadas y vulnerables a las heladas y friajes, para un manejo adecuado y oportuno de las enfermedades respiratorias.