Los bienes denominados tupus presentan un alto grado de valor, importancia y significado científico, histórico y social dentro del patrimonio mueble peruano.
El Ministerio de Cultura declaró a 50 bienes muebles, denominados tupus o prendedores, como integrantes del Patrimonio Cultural de la Nación, mediante Resolución Viceministerial N.º 000047-2023-VMPCIC/MC.
En esta norma se destaca que estos bienes culturales presentan un alto grado de valor, importancia y significado artístico, histórico y social dentro del patrimonio peruano, razón por la que son declarados como integrantes del Patrimonio Cultural de la Nación.
Estos bienes culturales de propiedad particular, denominados tupus o prendedores, son accesorios de plata de prendas femeninas que datan del periodo prehispánico, virreinal y republicano.
Además de evidenciar el uso exclusivo de una élite en el pasado, muestran el desarrollo tecnológico de la orfebrería, que se han ido modificando con el paso del tiempo, reflejando una alta calidad de manufactura en cuanto a su forma y diseño decorativo.
Sus representaciones iconográficas reflejan el resultado de la fusión de dos culturas, porque tienen imágenes de carácter fantástico como las sirenas, centauros o aves bicéfalas en medio de vegetación ornamental; y de animales locales como venados, vizcachas, monos y otros. Se evidencia la habilidad del orfebre para fusionar con originalidad los elementos propios de cada cultura, procurando su continuidad sin perder su funcionalidad.
Los tupus tienen una fuerte vinculación con nuestro pasado y presente, puesto que el uso de estos accesorios aún se mantiene en algunas zonas geográficas de nuestro país. La declaración de estos bienes culturales muebles nos permite seguir conociendo la historia de nuestro país, a través del entendimiento de las prácticas y acontecimientos más importantes de cada época.