Durante la ceremonia por el 57° aniversario del Instituto Nacional de Rehabilitación la ministra de Salud, Zulema Tomás, dijo que su sector está abocado a dar tratamiento de rehabilitación a las personas que fueron afectadas por esta enfermedad
La ministra de Salud, Zulema Tomás Gonzáles, destacó que tras culminar el brote de casos del Síndrome de Guillain-Barré, su sector está abocado en brindar tratamientos de rehabilitación a los pacientes que superaron la enfermedad en las regiones del país.
«Tuvimos más de 600 casos del Síndrome de Guillain-Barré (SGB) en el país con una mortalidad mínima, y se brindó tratamiento gratuito a los pacientes, así cumplimos con salvar vidas. Ahora, el personal de salud del Instituto Nacional de Rehabilitación está en las regiones brindando rehabilitación y terapia a los pacientes», informó.
La titular de Salud destacó esta importante intervención en la ceremonia protocolar por el 57° aniversario del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) «Dra. Adriana Rebaza Flores» Amistad Perú – Japón, que contó con la presencia de la directora del INR, Lily Pinguz Vergara; representantes de la embajada de Japón en el Perú, personal de salud, pacientes y familiares.
«El Instituto Nacional de Rehabilitación cumple una loable labor, porque no solamente mejora la calidad de vida de los pacientes que vienen por su recuperación, sino porque después de brindarles tratamiento los ayuda a que se inserten a la sociedad y en el trabajo», destacó.
Como muestra de la atención humanizada que impulsa el Minsa, los pacientes en rehabilitación y el personal de salud demostraron sus facetas artísticas con bailes costumbristas durante la ceremonia de aniversario del INR, lo cual fue aplaudido por la ministra Zulema Tomás, autoridades sanitarias y público presente.
El INR, anualmente, realiza más de 240 mil atenciones, entre terapias físicas, ocupacionales, de lenguaje y psicológicas; y cerca de 38 mil consultas médicas.
Los servicios que se brindan son de alta complejidad y calidad para la rehabilitación de la población con discapacidad, abordando gradualmente el aspecto físico, psicológico, social y ocupacional de cada paciente, con la participación del equipo multidisciplinario de salud, incluyendo fundamentalmente a la familia.