Ante alerta de sirenas. legisladores abandonaron sus curules para dirigirse a plazas Bolívar y Sánchez Carrión.
Los congresistas reunidos en el pleno del Congreso suspendieron a las 6.17 de esta tarde sus deliberaciones para participar de un inesperado simulacro de terremoto de intensidad 8.
El presidente del Congreso, Luis Galarreta, dispuso que se active la alarma y los legisladores de las distintas bancadas dejaron sus curules y salieron por las tres puertas laterales del hemiciclo del Congreso para dirigirse -en orden- a las plazas Simón Bolívar y José Faustino Sánchez Carrión que son los dos lugares determinados para un eventual refugio en caso de un sismo.
Junto a los legisladores también hicieron abandono del hemiciclo y sus oficinas los asesores y trabajadores del Congreso. Lo mismo hicieron los periodistas que a esa hora cubrían información sobre el debate parlamentario.
Galarreta declaró que solamente sabían de este simulacro de sismo los seis voceros de las bancadas e informó que se repetirán ese tipo de ejercicios «porque en un momento de desastre hasta las ambulancias se demoran».
Los congresistas retornaron a sus curules tras unos 20 minutos que duró el simulacro ante la advertencia del presidente del Congreso para que en al hemiciclo ingrese el menor número de personas para que, en caso de un sismo, la evacuación sea lo más rápido posible a fin de evitar accidentes que lamentar.