El Cometa 88P/Howell, en su inexorable danza gravitatoria con el Sol, pasará este sábado 26 de septiembre por su perihelio, es decir, por el punto de su órbita que está más cerca de nuestra estrella.
El Cometa 88P/Howell fue descubierto por la actual Dra. Ellen Howell, el 29 de agosto de 1981, utilizando placas fotográficas tomadas con una cámara Schmidt de 0.46 m del Observatorio del Monte Palomar (California, Estados Unidos de América).
Como su nombre indica, ha sido el octogésimo octavo cometa periódico en descubrirse. Los cometas periódicos, al igual que los planetas, orbitan el Sol.
Las trayectorias de estos cuerpos menores del Sistema Solar, usualmente descritos como “bolas de nieve sucia”, suelen caracterizarse por su gran excentricidad, esto es, por su alejamiento de la forma circular, constituyendo órbitas ovaladas o elípticas propiamente dichas. Una elipse, como se recordará, es la curva que resulta de cortar un cono con un plano, como se muestra en la figura que se adjunta.
La ruta que lo acerca
En su movimiento alrededor del Sol, siguiendo el dictado de la primera ley de Johannes Kepler (originalmente dada sólo para los planetas), el Cometa 88P/Howell dibuja una elipse. En esta figura, pero no en el centro, sino hacia un lado, en un punto característico dentro de la elipse denominado foco, está nuestro Sol.
La distancia entre el Sol y el cometa cambian continuamente, existiendo una distancia mínima que se da justo este sábado 26 de septiembre: el cometa 88P/Howell estará entonces en su perihelio (peri = cercano; helios = Sol). Sin embargo, no se trata de una cercanía como la de otros cometas, ya que estará a una distancia de 1.36 unidades astronómicas, lo que lo coloca a una distancia del Sol comparable a la de Marte.
El brillo del Cometa 88P/Howell va a ser muy bajo, imposibilitando su visualización a simple vista. Por esta razón, el Observatorio Astronómico de Moquegua (OAM) ha capturado algunas imágenes de este astro con su principal telescopio de un metro de apertura. Cabe resaltar que el OAM tiene entre sus objetivos la observación y, de ser el caso, la confirmación de un descubrimiento de estos visitantes misteriosos.