Ciudadanos venezolanos deberán presentar pasaporte y visa para ingresar al Perú a partir del 2 de julio

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Migraciones dejó sin efecto la resolución que permitía la entrada al territorio nacional solo con cédula de identidad.

La Superintendencia Nacional de Migraciones actualizó los requisitos documentarios para permitir el ingreso de ciudadanos venezolanos a nuestro país, a quienes se les exigirá, a partir del 2 de julio de este año, presentar su pasaporte ordinario y visa correspondiente otorgada por una oficina consular peruana.

Así se señala en la Resolución de Superintendencia N° 000121-2024-Migraciones publicada este jueves en el boletín de Normas Legales del Diario Oficial El Peruano, que estipula que estos documentos son obligatorios para solicitudes de calidad migratoria temporal y residente.

Asimismo, la norma indica que, para solicitar la calidad migratoria residente en su versión humanitaria, los ciudadanos venezolanos deberán presentar ante las autoridades de Migraciones su pasaporte ordinario vigente y su visa humanitaria vigente, otorgada por una oficina consular peruana.

El artículo tercero también conviene que, como medida transitoria, se permitirá por única vez que las personas venezolanas con pasaportes vencidos puedan solicitar un cambio de calidad migratoria, siempre que hayan ingresado al Perú antes de la entrada en vigencia de esta resolución y permanezcan en territorio nacional, además de cumplir los requisitos y condiciones inherentes a cada procedimiento.

Cabe mencionar que la presente norma deja sin efecto la Resolución Nº 000177-2019-Migraciones, la cual autorizaba el ingreso a territorio nacional de ciudadanos venezolanos menores y adultos para reunirse con su núcleo familiar, solo presentando la cédula de identidad, así como a personas en situación de vulnerabilidad.

La modificación de los requisitos de ingreso para los ciudadanos procedentes de Venezuela a nuestro país estandariza el tratamiento que se brinda a todas las personas de los países a los que se exige la visa. Además, mitiga los riesgos asociados al control migratorio con documentos que no tienen las medidas de seguridad de los pasaportes y visas.