- Miguel Campos De la Cruz, Miguel Oliva Sáenz y Edinson Calderón Vega camuflaron droga en sacos llenos de polvo de cacao para ser trasladada y comercializada en Macedonia, Turquía y Grecia.
Por unanimidad, el Juzgado Penal Colegiado Permanente de la Corte Superior de Justicia del Callao condenó a 15 años de pena privativa de la libertad efectiva a Miguel Ángel Campos De la Cruz, Miguel Ángel Oliva Sáenz y Edinson Manzur Calderón Vega al ser señalados como coautores del delito contra la salud pública en la modalidad de tráfico ilícito de drogas – tipo agravado, en agravio del Estado peruano.
El tribunal, conformado por los magistrados Gino Delzo Livias (presidente), Elena Bedón Cerda y Gladys Díaz Durán, los sentenció por haber intentado trasladar 48.890 kilos de cocaína camuflada en sacos de polvo de cacao con la finalidad de ser trasladada vía marítima a Europa para su comercialización.
Además, deberán pagar la suma de S/ 250,000.00 mil soles como concepto de reparación civil a favor de Estado peruano y 180 días multa equivalente a S/ 1,395.00 soles. También fueron inhabilitados por cinco años.
La duración de la condena tiene fecha de inicio el 4 de septiembre de 2019, día de sus capturas, y finalizará el 3 de septiembre de 2034.
Hallazgo
En el 2018, Edinson Manzur Calderón Vega y Miguel Ángel Oliva Sáenz se reunieron con un sujeto identificado como “Naser Ahmeti”, siendo éste último quien les propuso participar en el envío ilegal de droga mediante productos de alimentos a Europa.
Tras aceptar, Miguel Ángel Oliva Sáenz consigue la participación de Miguel Ángel Campos De la Cruz, quien tenía una empresa comercial de alimentos denominada “Agrosem Enterprise SAC” la cual tenía una deuda. Sin embargo, Oliva Sáenz la pagó para poder usarla en las operaciones clandestinas y tenerla como “fachada”.
A fin de distraer a las autoridades antidrogas generando antecedentes de envío y pretender un posterior traslado marítimo, se utilizó esta empresa para realizar un primer envío aéreo de cinco sacos de cacao a Macedonia sin la sustancia ilícita.
Es por ello que en junio de 2019 intentaron un segundo envío vía marítima de 1, 520 sacos de polvo de cacao y es aquí donde camuflaron los 48.890 kilos de cocaína, teniendo el mismo destino europeo.
No obstante, personal de DP World alertaron a las autoridades policiales de esta carga sospechosa ubicada en un contenedor, por lo que al hacer el muestreo se dieron cuenta de la sustancia ilícita.