Un 2 de agosto de 1979 falleció Víctor Raúl Haya de la Torre, fundador y líder del Partido Aprista Peruano Tenía 84 años de edad. Haya de la Torre presidió la Asamblea Constituyente de 1978 que dio origen a la Constitución Política de 1979.
Para esas elecciones y las del 85, el Apra presentó una lista que reflejaba su esencia fundacional; el Frente único de trabajadores manuales e intelectuales. Cuyos antecedentes se remontan al 23 de mayo de 1923 fecha en que recibió su “bautizo de fuego” cuando el joven Haya encabezó una marcha de protesta que constituyó la culminación de las luchas por la jornada de las ocho horas, la reforma universitaria que fueron la base histórica de la unión obrero-estudiantil contra la dictadura del oncenio encabezado por Augusto B. Leguía.
Lamentablemente en las sucesivas elecciones esa esencia se fue perdiendo hasta terminar con una bancada de cinco abogados y ningún representante de la clase trabajadora, esencia principal del aprismo primigenio que tuvo a Luis Negreiros Vega, Manuel Arévalo, Salomón Ponce, entre otros, que ofrendaron sus vidas por defender sus ideales.
¿Qué se debe hacer ahora?
“Creo que ante la vida y obra de Haya, la responsabilidad de responder a ese pendiente reto es de todos los apristas militantes de base y dirigentes de todos los niveles asumirlo con claras políticas y prácticas de unidad y de organización, de fraternidad que resuelvan las brechas que duele reconocer este 2 de agosto”, señaló Luis Negreiros Criado, exdirigente sindical, excongresista y ex secretario general de Confederación de Trabajadores del Perú (CTP).
“Creo que la solución, la sabemos: es aplicar la concepción ideológica y política de partido. Haya no se equivocó. Y depende realizarla sólo de voluntad y en nuestro caso, de voluntad aprista que Haya aceró con honestidad, moralidad, sacrificio, que hizo emblemáticas para un Perú justo culto y libre, y para el Apra, con que impulsó la estructura fundacional de frente único que responde a un esquema de lucha ante capitalismos imperantes y de justicia social”.
No debemos olvidar que con esa organización Haya ejerció el liderazgo de frente único de clases trabajadoras y clases productoras, así como impulsó una renovada, enraizada y responsable representación política en el Parlamento y los gobiernos locales, que requiere la representación en crisis que conocemos. con capacidades de partido, en movilizaciones, y en logro de leyes, reformas, reivindicaciones sociales y laborales, derechos sociales políticos, derechos humanos. Pienso que nuestra organización debería retomar ese reto”.
“Y en momentos como el que vivimos creo que es posible y urgente asumir ese reto pendiente de confrontar las políticas de mercado a ultranza, el capitalismo neoliberal super explotador y de negador de libertades, como los anteriores, ese por el que la dictadura arrasó la institucionalidad democrática, los partidos políticos, y los sustituyó por caricaturas de instituciones, partidos y políticas hechizas de libertades económicas, sociales y políticas.”
“Nuestra organización partidaria requería y requiere para ello reafirmase en los lineamientos ideológicos de Frente Único, de clases explotadas de del trabajo dependiente, independiente, informal, y clases productoras de las fuerza productivas de las micro y pequeñas empresas emergentes, del campo y la ciudad, de su democracia interna funcional, que asegure relaciones equilibradas y justas intra partidarias, en torno al Proyecto Nacional, para el que Víctor Raúl propugnó con el realismo constructivo de su confrontación al capitalismo.
“Para eso es necesaria la convocatoria a un Congreso Nacional, cuyos fines -entre otros-, es unir al pueblo aprista de renovados liderazgos y elevar nuestros niveles de lucha por el bienestar del país.”, finalizó
Por Octavio Huachani