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El presidente del Comité para el Manejo Sustentable del Calamar Gigante (CALAMASUR), Alfonso Miranda Eyzaguirre, planteó al nuevo gobierno que en los primeros 100 días de su gestión, emprenda una campaña de formalización de los pescadores artesanales a fin de que, se pueda convertir en sujeto de crédito, tener sus derechos laborales y de jubilación.
Según cifras oficiales, 76.286 mil personas en el ámbito marítimo y continental se dedican a la pesca artesanal en nuestro país, de los cuales, el 51 por ciento se concentran en Piura, Ica y Áncash.
Sin embargo, hay unos 40 mil pescadores artesanales que laboran informalmente, hecho que preocupa al sector, manifestó el dirigente pesquero.
«Existe una gran expectativa en el sector para que se concluya la formalización de los pescadores artesanales en un plazo no mayor de seis meses, sin trámites engorrosos y sin nuevos requisitos como lo que ha ocurrido en los últimos cinco años», manifestó Miranda Eyzaguirre.
Aseguró que la formalización producirá un verdadero cambio, las naves artesanales y sus permisos serán activos que apalancarían a los pescadores para acceder al crédito, mejores condiciones de vida y perspectiva de desarrollo.
Igualmente, dijo que se debería sentar las bases para que la pesca y acuicultura para consumo humano sean motores para desterrar la desnutrición y la anemia que representa el 12 por ciento y 40 por ciento de la población de niños entre 6 meses y 3 años, respectivamente, «lo que se ha incrementado por el Covid-19».
«Estos dos temas deben ser fundamentales y sus bases deben estar sentadas en los primeros 100 días de gobierno», subrayó.
Compra directa
De otra parte, el también Presidente de la Comisión Interamericana del Atún Tropical (CIAT) afirmó que el Perú, siendo un país pesquero, es el único del mundo cuyo Estado compra conservas a países que hacen competencia desleal a su industria, como Tailandia.
Se refirió al programa social «Qaliwarma», el mismo que, estimó, debe ser redefinido.
«Nosotros no podríamos vender una sola conserva a los programas sociales de China, Tailandia o Chile. Ellos sí lo hacen en el Perú. Además, el Estado peruano debe comprarle a la cadena productiva pesquera y no a intermediarios como ocurre ahora», sostuvo.
Miranda Eyzaguirre expresó su confianza en que el nuevo gobierno tome en cuenta estas propuestas porque son un clamor de todo el sector pesquero.
Recuperación pesquera
Al referirse a la producción pesquera, señaló que creció en 102.4 por ciento, y que, de enero a junio de 2021, las exportaciones para consumo humano llegaron a 794 millones de dólares, con lo que ya se superó en 22 por ciento el monto de las mismas a junio de 2019, antes de la pandemia.
El titular de CALAMASUR declaró que nuestro mar es generoso y uno de los más productivos del mundo, a la vez que destacó la recuperación del canal HORECA (hoteles, restaurantes y cafeterías) en el exterior, lo que contribuyó a ese crecimiento.
«Con políticas públicas que promuevan la pesca y acuicultura para consumo humano, podremos contribuir a la reactivación de nuestra economía», puntualizó.
Explicó que la labor de los pescadores artesanales, de los empresarios y exportadores, así como de los operarios en las plantas pesqueras ha hecho que la recuperación se haya producido antes de lo pensado.
Recordó que, a raíz de la caída por la pandemia, el restablecimiento -según estimaciones – se iba a producir en dos a tres años.
«Entonces, hay razones para estar optimistas y grandes desafíos para lo que resta del 2021 y de los siguientes años para que la pesca se convierta en unos de los pilares de recuperación económica, generación de empleo y desterrar la anemia, así como la desnutrición infantil», sentenció.